Judaísmo

Para los judíos, el agua es muy importante en los diferentes rituales purificación, usados para restablecer o mantener la pureza en el ser humano.

Las abluciones son ejemplo de ello. Incluyen lavarse las manos y los pies o la inmersión total en “agua viva” (es decir, el mar, un río, un manantial o en un mikvah, o baño ritual judío). Esto se lleva a cabo antes de los servicios religiosos, antes y después de los alimentos o en otras ocasiones especiales.

Uno de los principios del judaísmo que se encuentra en el Talmud se refiere a que se puede hacer uso del medio ambiente, sin dañarlo ni destruirlo.