La investigación pionera de Steven Carpenter, que le valió el Premio del Agua de Estocolmo en 2011 (concedido anualmente en el Día del Agua de la ONU), ha demostrado el impacto que las actividades humanas en las zonas aledañas tienen sobre los ecosistemas lacustres.
Sus hallazgos han servido de base para soluciones concretas en la gestión de lagos. Entre las especialidades de Carpenter, destacan los ciclos de los contaminantes, la eutrofización y la economía ecológica del agua dulce.
El profesor Carpenter puede ser considerado como uno de los más influyentes investigadores ecológicos en el campo del medio ambiente por su combinación de modelos teóricos con experimentos a gran escala en sus estudios sobre ecosistemas de agua dulce.
Es conocido sobre todo por sus investigaciones de las llamadas cascadas tropicales en los lagos, un concepto que explica como la influencia de un solo elemento en un ecosistema puede alterar toda la cadena alimenticia.